La etiqueta produce estigma en los jóvenes, aunque la situación a la que se refiere es transitoria, y afecta más a las mujeres, dice Emma Liliana Navarrete López, investigadora de El Colegio Mexiquense.
México desaprovechó el bono demográfico de los recientes años pasados, cuando la población joven alcanzó el mayor número de integrantes en la historia del país, pues no se le dieron las oportunidades educativas y laborales indispensables para su desarrollo, dijo Emma Liliana Navarrete López, profesora-investigadora de El Colegio Mexiquense.
En reunión a distancia con académicos y personal del Valle de México del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de México (Cecytem), la demógrafa presentó el libro (Re)significando a los jóvenes que ni estudian ni trabajan. Una mirada crítica a partir de 14 realidades, el cual coordinó con Mauricio Padrón Innamorato, profesor-investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, y que ha sido publicado por El Colegio Mexiquense.
Detalló que aclarar el origen del término nini está en el origen de la obra, debido al estigma social que la etiqueta significa para los jóvenes sin trabajo ni educación, a partir de las investigaciones de expertos de América Latina, Estados Unidos y España que se dieron a la tarea de estudiar el fenómeno en cada país considerado, sobre la base del análisis de bases de datos y cifras robustas.
En el libro se presentan artículos en los que se aborda la situación de jóvenes de 15 a 24 años, como una convención entre los autores y ante el hecho de que ese es el rango de edad que la ONU establece para los jóvenes -en México se toma en cuenta a quienes están entre los 12 y los 29 años, y en otros países el límite superior llega a los 34 años.
En la obra se separó la información de hombres y mujeres, pero en particular se excluyó de quienes no estudian ni trabajan a quienes realizan trabajo doméstico, debido a que la Organización Internacional del Trabajo ha definido como trabajo no remunerado al que se hace en casa.
Navarrete López resumió las aportaciones y conclusiones del libro en el enfoque de derechos, con énfasis en la educación y el trabajo; la transición a la adultez desde la perspectiva de los jóvenes; el sentido y alcance del bono demográfico, así como el trabajo doméstico en toda su importancia para el funcionamiento de las economías y las sociedades.
(Re)significando a los jóvenes que ni estudian ni trabajan. Una mirada crítica a partir de 14 realidades incluye trabajos de 25 investigadores y aborda la situación de los mal llamados ninis en Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, El Salvador, España, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, México, Perú y Uruguay.
Finalmente, la profesora-investigadora de El Colegio Mexiquense dijo que la etiqueta nini para referirse a los jóvenes que, se dice, no hacen nada, plantea un problema que preocupa a muchos países pero para el cual es frecuente que no haya políticas públicas dirigidas a atender una situación que el estudio y la experiencia demuestran que es transitoria y afecta sobre todo a las mujeres, a quienes en caso de permanecer en ella limita más, y ciertamente la pobreza y la estructura económica de cada nación son factores asociados al desempleo juvenil y la falta de oportunidades educativas.
Comunicado de prensa 006/2022.
Santa Cruz de los Patos, Zinacantepec, Estado de México, 21 de febrero de 2022.
